LA HORA DE LA DEMOCRACIA SUBALTERNA

¿QUÉ PASA CON LAS PRECANDIDATURAS, EL CONGRESO Y LA JEP?

MIGUEL ANGEL HERRERA ZGAIB

Director Grupo Presidencialismo y participación,

XIII SEMINARIO INTERNACIONAL GRAMSCI, 14-16 de noviembre 2017

¿Qué advierten las encuestas?

En el mismo día que los resultados coyunturales medidos por una encuesta señalan como puntero al precandidato independiente Sergio Fajardo, el avance notorio de la compañera de coalición Claudia López, y menos progreso de Jorge E. Robledo; y presentan una rotunda caída Germán Vargas, y un estancamiento de parte de Gustavo Petro.

Las mayorías del gobierno en el Congreso le propinan un sopapo a la coalición de la derecha y la reacción. Léase Cambio Radical y CD, dispuestos a bloquear la aprobación de la reglamentación de la JEP, teniendo como alfil al debutante Rodrigo Lara, quien preside la Cámara de representantes, y quien recibió su "bautismo de fuego," y se siente chamuscado a raíz de una aritmética errónea.

Los bloques político electorales

A pocos meses de las dos elecciones se alinderan las fuerzas, y se definen los bloques en contienda, mientras se pasa la prueba del 19 de noviembre, cuando se preparan consultas interpartidistas de Liberales, Conservadores y Centro Democrático.

Mientras tanto, el favoritismo de Juan Manuel, por el que fuera su vice, Germán, aliado en el triunfo de la reelección durante la segunda vuelta, pareciera desdibujarse, y puede llevar a engaño a más de un despistado.

Pero no conviene ser presa de espejismos. Juampa juega con las cartas marcadas, y, por lo pronto, obra como un comodín político. El zorro de César Gaviria así lo gritó desde la Convención liberal, en un grueso memorial de más de 40 páginas, que prueba el parroquialismo de nuestra política, si lo comparamos, p.e., con los discursos de Obama, Macrom o Merkel.

Hoy, más que nunca, el bloque dominante burgués que conduce Santos está atento a la evolución que presentan las fuerzas de centro-izquierda que tienen a tres precandidatos a la vista, Fajardo, López y Robledo.

La carrera de observación de la primera vuelta definirá hacia donde hará girar los restos del Partido de la U., y los conservadores oficialistas, dispuestos siempre a alinearse con quien vaya a ser ganador, porque se saben en minoría desde el quiebre histórico de la elección de 1946.

Entre tanto se perfila otro bloque posible, donde los precandidatos liberales, con la dupla Humberto de la Calle y Juan Fernando Cristo al comando, bajo los imperativos retóricos de matices de izquierda, sondean posibles alianzas, pensando también, primero en una coalición para confeccionar listas a congreso, de una parte; y otra, para ganar en segunda vuelta.

Este bloque en construcción corresponde al liberalismo socializante; y ya desprendió a dos aspirantes a colincharse en esta aparente confusión, Viviane Morales y Juan Manuel Galán, quien amenaza dizque con resucitar al nuevo liberalismo que murió con su padre, dos veces, la primera cuando pactó con el turbayismo, con la intermediación de César Gaviria, y la segunda cuando fuera asesinado impunemente en Suacha.

El tercer bloque que debe incorporar in pectore a fuerzas de izquierda y democráticas tiene al progresismo maltrecho como principal convocante, a raíz de las causas contra Gustavo Petro, por sus yerros administrativos al frente de la Alcaldía de Bogotá, que lo tienen sitiado desde el Tribunal, la Contraloría y la Personería.

Es urgente

Igualmente, "desempantanar" la errática conducción del nuevo partido de raigambre campesina, la Farc, para incorporarle el perfil urbano que tiene vocería en la figura de Rodrigo Londoño, publicista de la Nueva Colombia.

Por lo señalado es fundamental que lleguen a un acuerdo pronto las tendencias que lideran Iván Márquez y el presidente del partido recién creado, y que le den seguridades a sus bases acantonadas y abandonadas a su suerte, ante la desidia de un gobierno "faltón y remiso."

Lo es también que los movimientos Marcha Patriótica y Congreso de los Pueblos, junto con el CRIC, y la CUT, impulsen la esperada interlocución al interior de este bloque, con el objeto de propiciar una fórmula que junte a las candidaturas que le son cercanas, empezando por Piedad Córdoba y Clara López, y otros aspirantes del abanico de izquierda democrática. Porque, a la vista, les está "cogiendo el tarde".

Es de este campo que tiene que arrancar la propuesta del Frente Común, que lime asperezas y haga posible un triunfo de la izquierda democrática, decisiva en la segunda vuelta, sin duda, pero que tiene que posicionar un candidato para disputar la primera vuelta, que la coloque en la primera línea.

Pero, sobre todo, el bloque subalterno en tardía constitución, tiene que contribuir, por sobre todo, a la elección del mayor número de congresistas que se conviertan en el efectivo blindaje, el anillo de protección y avance para los acuerdos de paz, que permita el tránsito cierto de la hegemonía de la paz neoliberal a la paz subalterna.

Que sea la necesaria trinchera para el avance urgente, irreversible para que Colombia construya, así, la paz democrática que impida cualquier regresión para-presidencial que aún patalea y rezonga con fuerza.