"DESDE ABAJO" LA VOZ Y LA HISTORIA DE LOS SUBALTERNOS
EN COLOMBIA Y EL MUNDO
En el exhibidor del proyecto Ciudad Blanca, durante la segunda jornada del IX Seminario, junto a tres tomos de los Cuadernos de la Cárcel, hechos con las notas carcelarias de Antonio Gramsci, en la publicación de 1975, hecha por la editorial Einaudi, estuvieron el mensuario "Desde Abajo", del mes de septiembre/octubre de 2014, y un ejemplar de Le Monde Diplomatique, edición Colombia, al lado de las revistas SURMANIA e INTERLOCUCIONES, asociadas con el Grupo Presidencialismo y Participación.
El proyecto DESDE ABAJO
Este mensuario de la intelectualidad de izquierda y democrática colombiana alcanza ya el año XXII de su existencia, con la fórmula que "La pensa se hace a diario y entre tod@s" El equipo que lo hace posible, y sus colaboradores insisten en que representan y dan prueba que son "otra posición para leer".
La presencia de los dos ejemplares mostrados, y un suplemento dedicado a la memoria de Rafael Uribe Uribe, el suplemento Persistente memoria N.2, coincidieron con la realización del IX Seminario, en su campaña de nuevas suscripciones. A través de la disposición gratuita a los profesores de Ciencia Política, acompañados de una carta firmada por Mauricio Pérez, en que ofrecen 22 ediciones por el valor de $108.000.
Alguno de los asistentes a la segunda jornada, en la mañana, tomó el ejemplar de Le Monde Diplomatique que se exhibía, y no regresó más al estante. Pero, de este acto no queda duda que interés por tal publicación existe, aunque, cómo dudarlo, de forma individualizada.
El periódico lleva hasta la fecha 206 ediciones, y hoy cuesta comprado unitariamente $ 3.000. Ha superado con creces publicaciones que hicieron presencia desde los años 70, y que nutrieron y debatieron las disputas, programas y discursos de la izquierda. En particular, recuerdo, por ejemplo la experiencia de El Manifiesto, que dio expresión a la Unión Revolucionaria Socialista, y si mal no recuerdo, no logró superar las 60 apariciones.
Un vistazo parcial al contenido
"Los ejecutivos nacionales, su composición,...se han convertido en organismos de trabajadores donde las convenciones colectivas son vapuleadas cada día con pactos colectivos, contratos basura y la estabilidad laboral es un mito," Desde Abajo , editorial. N. 206. Septiembre 20/14, p. 4.
Quiero llamar la atención sobre tópicos políticos y culturales que enriquecen estas publicaciones de septiembre. En primer lugar, el editorial "Del Presente y futuro de la Cut".
En la evaluación de los trabajadores sindicalizados, con ocasión de su congreso ya celabrado, 24-26 de septiembre, en Santa Marta, una ciudad sedienta, al pie del mar Caribe, se pasa revista a la existencia de 28 años de la CUT y su proyecto. Las cifras son indicativas de un trasegar incierto. Para 1986, la CUT arrancó con 1 millón cincuenta mil afiliados, y a finales de 2013 esto llegan a 513.000.
Adicionalmente, si se juntan otras centrales como la CGT, y la CTC, y se le suma el sindicalismo independiente. los obreros y empleados de Colombia organizados apenas si alcanzan a ser el 4,7 por ciento de la población económicamente activa, el PEA, los trabajadores.
Este es un cuadro objetivo del grado de organización consciente de la clase y grupos subalternos directamente relacionados con el mundo del trabajo,a través de diversas figuras que van desde el "obrero masa hasta el obrero social". De este último hablaron Tronti y Negri, desde que escribáin en los "Cuadernos Rojos" bajo la orientación inicial del socialista Raniero Panzieri.
Al analizar el fondo de la composición social de la fuerza trabajadora, está claro para el editorialista que "La CUT, y el sindicalismo en general, se restringen cada día más al círculo de los trabajadores estatales, en lo fundamental el magisterio."Y en materia de dirección de esta fuerza, el panorama no es alentador. Recuerda en parte, al que los socialistas comunistas de la revista/periódico L´Ordine Nuovo, con Gramsci a la cabeza, en la segunda década del siglo XX, censuraban del sindicalismo socialista mainstream,
Se anunciaba que el Congreso lo marcará una disputa entre tres corrientes que se expresan en el ejecutivo nacional: democrática, PDA y clasista, pero no una discusión realmente democrática que involucre a las menguadas bases de los trabajadores. Como si se hiciera oídos sordos de lo conseguido por los Ordinovistas, cuando sacudieron la modorra sindicalista en Turín y Milán hace 100 años.
El editorialista reclama que se de voz y presencia a tesis elaboradas por obreros/empleados en el sitio de trabajo, rama de producción y territorios. Pero no será así, por el contrario, se tratará, dice, de un debate de trámite que agravará la agonía de una forma de organizar y decidir caducada.
(Continúa)
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